Era una calurosa mañana, Geronimo Stilton siempre iba al bar a tomarse un capuchino y un brioche al queso, después, iba a comprar el periódico El Eco del Roedor, pero no tenían, entonces fue al kiosko Solomegustan Lasrevistas, pero tampoco tenían dijo el kioskero:
-Ya no hay revistas del EL Eco del Roedor
-¿Cómo? ¿Ya se han acabado?
-Ya no se venden, ahora están de moda ¡El Grito De La Rata De Alcantarilla!.
Geronimo compró uno, lo leyó, y ponía que la revista del Eco del Roedor estaba en quiebra.
Geronimo pasó un rato con el periódico leyéndolo y sin querer alguien abrió la puerta de repente. Si queréis saber más está en la bilblioteca.
Está mejor, pero hay que intentar no usar muchas palabras textuales del libro.
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