domingo, 11 de noviembre de 2012

El día y la noche

El Sol habla con las nubes
y la Luna con las estrellas.
El calor del Sol provoca una
gran capa de alegría.

Al mismo tiempo que la Luna,
allá en el horizonte provoca
una luz blanca que alumbra.

Y así es la poesía del Sol
y la Luna, con su amor y
ternura, tan felices
se les ve como un niño
jugando al pilla-pilla.

El día y la noche

Aquella noche tan negra
como la  boca de un lobo,
el cielo nos hacía guiños
con sus miles de ojos.

Ya quería aparecer el día,
pronto llama el sol al gallo
para que cante.
Lenguas de fuego aparecen,
y las luciérnagas desaparecen.
A las doce, la gran caldera de fuego,
a lo más alto asciende.