El retorno del esqueleto

Todo esto empezó un verano que hacía un calor horrible en Fogville. El señor Silver fue a por el correo y cuando volvió traía el periódico y un sobre con un pergamino amarillo. Leyeron el remitente y era la tía de los Silver, la arqueóloga. La carta decía que, habían abierto unas excavaciones al lado de su casa en Ditchville, ponía también que fuera la familia Silver. Cogieron un tren a las cuatro en punto y tardaron un par de horas hasta llegar al diminuto pueblo de Ditchville, cuando llegaron no estaba su tía Gergovia en la estación. De pronto, un coche apareció a lo lejos a toda velocidad, cuando estaba al lado de ellos, pegó un frenazo, después salió una señora mayor de la furgoneta ¡Era la tía Gergovia!  Entonces cogió a Bat y dejó que alzara el vuelo. Le explicaron que era su mascota. Después  fueron a su casa y estaba llena de papeles y reliquias antiguas. A continuación les enseñó sus habitaciones y a Bat le dio una casita que tenía en el jardín. En la cena, tía Gergovia había preparado albóndigas que parecían fósiles, después de cenar les enseñó un mapa de las excavaciones y se lo explicó. Entonces se fueron a la cama y Bat dio un vuelo para comer mosquitos, de repente un silbido tremendamente agudo lo descontroló. Al día siguiente, fueron a las excavaciones, tía Gergovia les había dicho que a la cueva del fondo no entraran, fueron viendo las excavaciones hasta que llegaron al final y se encontraron con la cueva.  Había dos tablones cruzados y un gran cartel que ponía: “¡Peligro! Prohibida la entrada a personas ajenas a las excavaciones” ¿Qué ocurriría? ¿qué habría en esa cueva? Si lo queréis leer, lo podéis encontrar en la biblioteca.