domingo, 30 de diciembre de 2012

El Castillo de Zampachicha Miaumiau


En la noche de Halloween, a Gerónimo se le paró el coche en un castillo, el castillo Miaumiau.
Llamó al timbre para ver si le podían arreglar el coche, de repente se abrió la puerta, pero en el castillo no había nadie y entonces entró.
Primero fue a la cocina y se encontró un esqueleto de rata en el armario y cuando volvía vio también un hueso de rata.
Después subió la escalera y vio muchos cuadros que eran retratos de los antiguos dueños del castillo. Notaba como si le miraran y se dio cuenta que los ojos del retrato de Zampachicha Miaumiau estaban agujereados.
Cuando entró en el salón, se escuchó un ruido y se le apareció el fantasma de Zampachicha; le dijo que le mataría, y Gerónimo casi se desmayó de miedo. Entonces llamó a su hermana Tea y le dijo que se viniera al castillo, para hacer un titular sobre el fantasma.
Con ella vinieron su primo Trampita y su sobrino Benjamín. Cuando estuvieron todos juntos se dividieron para buscar al fantasma por las distintas habitaciones del castillo. De repente, apareció una persona tapada por sábanas blancas. Gerónimo se llevó un susto de muerte, y se dio cuenta de que era Trampita.
Gerónimo fue a la biblioteca, se escuchó un ruido y de nuevo se le apareció el fantasma. Llamó a sus amigos, pero el fantasma desapareció antes de que vinieran.
Todos se fueron a la cama. Cuando Gerónimo se durmió, un ruido lo despertó y vio que una momia se le acercaba por el pasillo. Volvió a llamar a sus amigos y antes de que llegaran, la momia se esfumó.
Antes de volver a dormirse, haciéndose el valiente dijo: "¡Yo no creo en esas tontas supersticiones!" Se oyó un ruido...
¿Qué pasará? ¿Será el fin de Gerónimo?
A mí me ha gustado porque es muy divertido y tiene mucho suspense.

1 comentario:

  1. Sí señor, Manolo, esto está muy requetebien, ya sabía yo que tú podías sacar el escritor que llevabas dentro. Felicitaciones.

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